VOL. 1:
Cómbita
Cierra los ojos, respira, ponte audífonos y ya estás listx para tu viaje 360º
Recorre Cómbita - Boyacá junto a estas postales sonoras:
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Día 1: Contentillo en la lomita El Carmen.
Día 2: Me arrimo al monte que me ampara.
Día 3: Matazón en el páramo La Peña.
Día 4: La casita de los años upa. ¡MUY PRONTO!
Día 5: Sin chistale ni un mu. ¡MUY PRONTO!
Día 6: El convite pa' regresar. ¡MUY PRONTO!
Día 1: Contentillo en la lomita El Carmen
Copla: "Que vivan los campesinos y los dejen vivir, que el campo sin campesinos, existe sin existir."
Antes de que salga el sol empieza el día del campesinado, el camión hace parte de la familia y el destino es la plaza, pero aún queda trabajo en casa. Los sonidos de la cosecha, el canto de los animales y conversaciones de un día a día que no todxs se le miden, pese a que es indispensable para la humanidad.
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Día 2: Me arrimo al monte que me ampara
Copla: "Un rayito de luna, entre la selva dormía, la luz de tus ojos ha iluminado mi pobre vida, tu diste luz al sendero, en mis noches sin fortuna, iluminando mi cielo con un rayito claro de luna."
Luego del caos del día, cae la noche en el monte, un rayo de luna en sintonía con los animales nocturnos regresan la paz al corazón arrugado de nostalgia de una campesina y acompañan así su despedida ¿cómo vamos a sentir la calma cuando no exista la naturaleza?
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Día 3: Matazón en el páramo La Peña
Copla: "Yo soy hija de la malva, de la malva yo nací; no tengo padre, ni madre, que tristeza para mí."
Los sonidos del pasado, presente y futuro cohabitaron en este paisaje sonoro, una guerra entre épocas donde el territorio se tornó de verde a gris, las víctimas no solo fueron humanos, la tradición, la fauna y flora también desaparecieron ese día.
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Día 4: La casita de los años upa
Copla: "Desde aquí te estoy mirando, la puntica del alpargata; la boca se me vuelve agua, y el corazón se me parte."
Los años pasan y el campo envejece, la juventud estudia y se va, se coleccionan despedidas y casas abandonadas. Luego de intentos de repoblación, la huella de la humanidad eventualmente se vuelve fantasma, y la era animal salvaje regresa.
Día 5: Sin chistale ni un mu
Copla: "Yo venía pa' mi casa, y el vecino me convidó; una tutuma de guarapo, y hasta su cosecha me encimó."
Lazos animales, humanos y todos naturales. La separación de dos familias, una independencia temprana y el arte de arriar el ganado. ¿Te animas a recorrer junto a la santa vaca?
​Dia 6: El convite pa' regresar
Copla: "Allá arriba en aquel alto, tengo una piedra barrosa; donde ensillo mi caballo, para irme a Santa Rosa."
No hay como Dios y el campo, esta vez el camión va en dirección al hogar pa’l reencuentro familiar. Las golondrinas se unen en sinfonía para anunciar un nuevo inicio y convidar a quienes se habían ido, a su llegada, el tejo los encuentra.